Nota editorial: ¡Debemos seguir en la lucha!

por Comunicación Formagro
28 de marzo del 2018 11:21 am

Anne Loranger – King, directora del proyecto FORMAGRO

Cada año, el 8 de marzo recordamos una lucha importante, sobre todo nosotras y nosotros que trabajamos en temas de desarrollo social inclusivo y en la cooperación internacional, debemos analizar cómo podemos tener siempre impactos positivos. Es esencial tomar al menos un día al año para recordar la importancia de las mujeres en nuestro mundo y todas las desigualdades que diariamente sufren en el ámbito social, económico, ambiental, político y laboral. Es gracias a la lucha de varias mujeres que hoy en día tenemos derechos que hace varios años no teníamos: derechos de votar, de tener propiedad, entre otros.

Sin embargo, siempre me pregunto por qué tenemos que esperar a que pasen injusticias y dramas antes de actuar, antes de poner normas que permitirán a todas, igualdad de oportunidad y respeto de sus derechos humanos. Históricamente se celebra el Día Internacional de la Mujer porque más de 100 mujeres fueron quemadas vivas en un incendio en Nueva York, hecho que hizo que diversas sindicalistas del mundo se unieran para fortalecer las luchas a nivel mundial. Desde 1910, año en lo cual se oficializó el primer Día de la Mujer, hubo mejoras y varias luchas fueron ganadas. Pero no ha sido suficiente. En ese boletín presentamos algunas estadísticas y datos que confirman que todavía estamos muy lejos de lograr una justicia de género y que las brechas son aún muy reales. Para las mujeres en el Perú, la situación es compleja, y más todavía para las mujeres rurales. Las brechas son fuertes y los derechos económicos, sociales y culturales de las mujeres no son respetados. En un país de renta media y que está considerado como emergente, las estadísticas son alarmantes (la tasa de analfabetismo es muy alta, así como la tasa de desnutrición crónica, hay una falta de respeto de los derechos sexuales y reproductivos, entre otros).

Productora participante de la primera Feria Agroecológica de Lunahuaná. Foto: SUCO

No obstante, a parte de estas estadísticas, debemos reconocer que el país cuenta con mujeres valientes, luchadoras y revolucionarias. Eso es lo que queremos resaltar en esta quinta edición de los boletines del FORMAGRO, las voces de las mujeres del proyecto, que diariamente quieren cambiar el perfil de su región y localidad para realizar mejoras sociales y económicas. Hay que recordar que el proyecto fue pensado para formar a 2,000 jóvenes, de los cuales 800 eran mujeres. Sin embargo, no imaginamos que la mitad de esas personas podía ser mujer, porque el discurso predominante era que el agro estaba reservado para los hombres y que iba ser un gran reto atraer a las mujeres. Es cierto que es un desafío para las mujeres en el campo, pero el interés ¡no falta!

Por ejemplo, de la totalidad del alumnado de los dos años de ejecutado el proyecto (2016 – 2017) el 59% han sido mujeres. Ellas se han interesado mayormente en los módulos de producción agropecuaria sostenible, de transformación y de emprendimiento. Además, para el 79% de las mujeres egresadas de FORMAGRO, es una meta muy importante el impulsar o seguir impulsando su propio negocio y el 58% de las mujeres egresadas sienten que el proyecto les ayuda a desarrollar su autonomía económica.

Nos sentimos entonces muy orgullosas y orgullosos de presentar esos testimonios de algunas de las mujeres del FORMAGRO y esperamos puedan servir de inspiración para muchas otras mujeres. El proyecto nos ayuda a identificar cada vez mejor las necesidades que ellas tienen y, por ello, contamos con una estrategia de Igualdad entre Mujeres y Hombres (IMH) que se elaboró para poder alcanzar una mayor justicia de género en nuestras zonas de intervención. ¡Debemos seguir en la lucha!