El Sistema de Garantía Participativo (SGP) y su importancia para promover la agroecología en el Perú

por Comunicación Formagro
17 de septiembre del 2018 2:20 pm

Productora de Yauyos, Lima.

En los últimos años, cada vez más personas buscan conciliar el consumo de alimentos saludable con el cuidado del medio ambiente y la justicia eco social[1]. La agricultura orgánica nace como una respuesta efectiva a esta demanda.

El mercado de productos orgánicos crece de manera sostenida, tanto en producción como en áreas cultivadas:  178 países tienen actividad agrícola orgánica en cerca de 58 millones de hectáreas; de ellas, casi 7 millones están en América Latina, cultivadas por 2,7 millones de productoras y productores orgánicos (World of Organic Agriculture, 2016).

El Perú tiene un gran potencial para la agricultura orgánica. Sus diversos pisos ecológicos generan condiciones excepcionales para el desarrollo de diversos cultivos. De acuerdo con cifras del Instituto de Desarrollo y Medio Ambiente (IDMA, 2015), cerca de 97,000 productoras y productores orgánicos trabajan aproximadamente 607,872 hectáreas[2].

Los productos orgánicos que más se cultivan en el país son el café, el cacao, el banano, la quinua y la castaña (IDMA, 2015).  La mayor parte de la producción orgánica está orientada a la exportación.

Moisés Quispe, director ejecutivo de Asociación Nacional de Productores Ecológicos del Perú (ANPE Perú), estimó que en el 2018 la venta de productos agroecológicos, o alimentos libres de agroquímicos y pesticidas, crecería 17 % frente al año anterior. (Gestión, 2017)[3]

En ese contexto, frente a la necesidad de las pequeñas unidades agrícolas familiares de certificar su producción para el mercado local y la imposibilidad de cubrir los gastos que demandan las certificaciones de tercera parte, nace el Sistema de Garantía Participativo (SGP).


¿Qué es la certificación orgánica?

Es un instrumento que permite evaluar que un producto (como frutas, verduras, derivados animales, vinos, jugos, entre otros) reúna las características y requisitos para ser llamado “orgánico” ante los consumidores y comercializadores, como ante las entidades estatales responsables de la calidad de los alimentos.


 

EL SISTEMA DE GARANTÍA PARTICIPATIVO

Como señala la Ley de Promoción de la Producción Orgánica o Ecológica del Perú, el SGP es el sistema desarrollado a través de la relación y participación directa entre las personas productoras, consumidoras y otros miembros de la comunidad, quienes verifican, entre sí, el origen y la condición de los productos ecológicos u orgánicos y, a través del sistema, garantizan la producción, comercialización y consumo de estos productos en el mercado interno.

A su vez, es un proceso de fortalecimiento de la organización social, de sus capacidades productivas, de promoción de la seguridad alimentaria y de generación de credibilidad de la producción ecológica, con participación directa y solidaria de un colectivo social.

Los primeros Sistemas de Garantía Participativos nacieron en Brasil, Uruguay, Paraguay, Chile y Bolivia, respondiendo tanto a la necesidad de los productores de generar credibilidad como a la alta y creciente demanda de productos orgánicos.

EN EL PERÚ

En 2005, la ANPE y el IDMA desarrollaron un método para garantizar la calidad ecológica de los productos que estuviera adaptado a la realidad de la pequeña producción orgánica peruana.  Este método, también permitía crear conciencia y promocionar la producción y consumo de productos agroecológicos e impulsar el desarrollo de mercados locales.

El Sistema de Garantía Participativo en el Perú se implementó, a manera de piloto, en 4 regiones: Cajamarca, Lambayeque, Junín y Cusco. Actualmente, más de 3,000 productoras y productores lo implementan en diversas regiones del país, quienes deben renovar anualmente su certificación.

Este año, sólo en Lima,  se capacitaron 60 evaluadores de la conformidad de la producción orgánica. La “validación” la realizan los “Consejos Regionales del Sistema de Garantía Participativo”, que junto con el “Consejo Nacional del Sistema de Garantía Participativo” otorgan el llamado “Sello de Garantía Participativa”.

En el proceso, también se involucra el público consumidor, durante la “evaluación de la conformidad de la producción orgánica”, lo que genera garantía y asociatividad. El año pasado se certificaron, solo a nivel de Lima, un total de 284 productoras y productores.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

¿CÓMO BENEFICIA EL SGP A LAS AGRICULTORAS Y LOS AGRICULTORES PERUANOS?

  • Les permite acceder a mercados diferenciados que valoran el enfoque ecológico de su producción. Impulsa también un contacto más directo con sus consumidores.
  • Fortalece su trabajo organizado y la asociatividad, para que los grupos de productoras y productores se fortalezcan y tengan mayores beneficios a partir del esfuerzo colectivo.
  • Garantiza el cuidado del medio ambiente, al promover la conservación de la biodiversidad de cada zona.
  • Ayuda a las y los agricultores, a través de la orientación y acompañamiento técnico, a la transición de la agricultura convencional a la orgánica.

 

¿CUÁLES SON LOS RETOS QUE ENFRENTA ACTUALMENTE EL SGP?

Si bien el SGP es mencionado como un sistema de certificación ecológica para el mercado interno por la Ley de Promoción de la Producción Orgánica o Ecológica (Ley N° 29196) y su reglamento, falta un reglamento oficial que regule su puesta en práctica.

Ello, por ejemplo, impide que las y los productores puedan ingresar sus productos como ecológicos en las cadenas de supermercados nacionales, como si sucede en las pequeñas cadenas o ferias.

Frente a este vacío, instituciones como la ANPE y el IDMA han desarrollado sus propios procesos y continúan luchando por poner el tema en agenda cada año.

“La ley actual se queda corta. La idea es seguir empujando el tema todo lo que podamos”, comenta Maikol Muñoz, Especialista de FORMAGRO en Lima.

El SGP permite certificar la producción de las pequeñas unidades agrícolas familiares.

 

 

[1] “Justicia ecosocial” hace referencia la lucha por derechos relacionados a la ecología, como derechos territoriales o el respeto a zonas protegidas.

[2] Más de 150 mil hectáreas se encuentran proceso de transición.

[3] Fuente:  https://gestion.pe/economia/venta-productos-agroecologicos-peru-creceria-17-2017-220860