Formagro: trabajando con Canadá y el Perú para favorecer a las poblaciones vulnerables

por Comunicación Formagro
15 de diciembre del 2016 3:51 pm

Entrevista a Gail Cockburn, Directora – Perú, Bolivia – Embajada de Canadá

– ¿Cómo calificaría la relación bilateral entre Canadá y el Perú?

Canadá y el Perú tienen una relación de colaboración de más de 40 años. El apoyo de Canadá fue clave para fortalecer a algunas de las instituciones más importantes. En los últimos años dicha relación ha experimentado un rápido crecimiento y una mayor convergencia de prioridades. Compartimos un mismo punto de vista con relación a la educación, la mejora de la situación de los pueblos indígenas, los derechos humanos, e incluso la igualdad de género.

Mantenemos una cooperación mutua dentro del sistema de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la Organización de los Estados Americanos (OEA), y la Cumbre de las Américas. Además, Canadá está interesado en apoyar los esfuerzos que el Perú está realizando para integrar los estándares de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

La Reunión de Líderes de la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), que se realizó en Lima los días 17, 18 y 19 de noviembre, fue una oportunidad para que el Primer Ministro Justin Trudeau sostuviera valiosas conversaciones con el Presidente Pedro Pablo Kuczynski. El Primer Ministro Trudeau abordó la importancia de las inversiones públicas bien dirigidas que generen oportunidades para todos los segmentos de la población.

El Ministro de Asuntos Relaciones Exteriores de Canadá, Stéphane Dion, participó en la Cumbre de los Ministros de Relaciones Exteriores de la cumbre APEC. En los márgenes de la Cumbre, se reunió con representantes de Amnistía Internacional y Transparencia Internacional para tratar sobre temas de derechos humanos, justicia, gobernanza e igualdad de género. Asimismo, participó en una mesa redonda con un importante grupo de expertos en cambio climático.

 
– ¿Cómo ha sido el trabajo de la cooperación canadiense en el Perú y el apoyo a los programas de desarrollo?

El Programa de Desarrollo de Canadá en el Perú es un componente importante de las relaciones entre ambos países. Se encuentra alineado con las prioridades del Perú de reducir la pobreza y las desigualdades; fortalecer la calidad y la eficiencia de la educación, incluyendo la educación técnica y la intercultural bilingüe; mejorar la gestión ambiental, especialmente en el sector de recursos naturales; e incrementar las oportunidades económicas para poblaciones excluidas dentro de un Perú democrático e inclusivo.

Además, dicho Programa integra de manera transversal los temas de gobernabilidad, medio ambiente e igualdad de género. Está dirigido a las poblaciones vulnerables tales como las mujeres, niñas, adolescentes, jóvenes, pueblos indígenas y pobres.

Entre nuestros socios nacionales principales se encuentran los ministerios de Agricultura y Riego, Educación, Energía y Minas, Medio Ambiente; la Defensoría del Pueblo; y diferentes gobiernos locales regionales, provinciales y distritales.

Nuestro Programa aplica los principios de eficacia de la ayuda y transparencia, es por ello que todos nuestros proyectos se basan en resultados y están sujetos a evaluación para asegurar su mejora continua.

Recientemente hemos realizado una consulta a nivel mundial, sobre la ayuda internacional, cuyos resultados deberán alimentar el proceso de revisión de nuestro apoyo al desarrollo que está teniendo lugar actualmente. En el Perú participaron nuestros socios de los sectores público y privado; de la sociedad civil, tanto peruana como canadiense; y de la cooperación internacional.

 
– Se acaba de suscribir un compromiso para ampliar la relación bilateral entre Perú y Canadá, y apoyar en temas de educación, ciencia y tecnología, crecimiento económico sostenible, medio ambiente y gobernabilidad. ¿Cómo se podrá viabilizar este compromiso?

El Marco de Responsabilidad Mutua (MAF) para la Cooperación para el Desarrollo, que ha sido firmado el 12 de abril de 2016, incluye mecanismos de revisión conjunta. Este tiene como objetivo ampliar la relación bilateral y apoyar los temas de educación, ciencia y tecnología, crecimiento económico sostenible, medio ambiente y gobernabilidad, así como crear una plataforma de diálogo entre ambos países para contribuir al desarrollo del Perú.

Canadá trabaja estrechamente con sus socios para dar a conocer el impacto que su asistencia al desarrollo está produciendo en la vida de los peruanos. Para ello, comparte información sobre historias exitosas y resultados de sus intervenciones a través de las redes sociales tales como Facebook, Twitter y páginas web, comunicados de prensa, así como en eventos de lanzamiento de proyectos, conferencias y talleres.

 
– Para usted ¿cómo el proyecto Formagro se alinea con las prioridades que tiene la cooperación canadiense en el Perú?

El Formagro se encuentra perfectamente alineado con las prioridades de reducir la pobreza y las desigualdades, fortalecer la calidad y eficiencia de la educación e incrementar las oportunidades económicas para poblaciones excluidas. Claramente se trata de un proyecto que le pertenece al Perú, pues fue diseñado por SUCO con la activa participación de los Ministerios de Educación y de Agricultura y Riego, además de las organizaciones no gubernamentales peruanas ALLPA e IDMA. Su vasto programa de formación permitirá que incluso aquellos jóvenes que no han podido terminar la secundaria puedan desarrollar nuevas competencias, mejorar sus perspectivas de empleo y contribuir a un sistema productivo agrícola más eficaz y, por ende, mejorar la calidad de vida de sus familias.

Además, está previsto que el proyecto contribuya a la adaptación al cambio climático. Esto es importante porque Canadá se ha comprometido a apoyar a los países más vulnerables como el Perú, a adaptarse a los efectos adversos de este fenómeno.

Joven de Huari – Áncash (Foto: Carlos Ly)

 
– ¿Qué avances y logros se espera concretar en el Perú con el proyecto Formagro?

Canadá espera que el Formagro apoye a las poblaciones más vulnerables para que encuentren trabajo. Asimismo, que empodere a las mujeres, fortalezca a los actores locales, y favorezca una mayor coordinación intergubernamental e interinstitucional.

Por supuesto, el proyecto debe aplicar una adecuada estrategia de salida, a fin de asegurar la sostenibilidad de sus resultados. Por esta razón, la participación activa de las contrapartes nacionales, tanto del gobierno como de la sociedad civil, debe darse de manera permanente.

 
– ¿Algo más que le gustaría añadir?

El empoderamiento de las mujeres, particularmente las mujeres jóvenes, y su participación en la toma de decisiones es clave para lograr el desarrollo de sus comunidades.

Una de las fortalezas principales del proyecto radica en su carácter participativo. Es evidente que la decisión de haber involucrado a sus contrapartes nacionales (Ministerios de Agricultura y Riego y de Educación) desde su diseño ha contribuido a que ellos se apropien de él. Los esfuerzos para lograr sinergias con otros proyectos e iniciativas, nos parecen importantes también.

Por todo ello felicito a SUCO y a sus contrapartes.