Resumen

Agricultura familiar – Huari, Áncash

La pequeña agricultura genera cerca del 80% de los productos alimenticios que se consumen en el mercado nacional, sin embargo, la mayoría de los agricultores viven en una situación de pobreza.

En este panorama, las características del contexto agrícola en la sierra del país (fragmentación en acceso a la tierra, pobreza, autoconsumo, articulación comercial tradicional), influyen en las oportunidades de educación para los jóvenes (falta de oferta educativa) y en las posibilidades de empleo, la agricultura se ha convertido en una actividad poco atractiva, especialmente para los jóvenes que prefieren migrar a las ciudades pues ahí encuentran una mejor oferta educativa y mejores oportunidades de empleo.

Cabe señalar que en el Perú, durante el 2013, de los 8 millones de jóvenes, el 77% residía en las ciudades y el 23% en el ámbito rural (1 millón 941 mil jóvenes). Además, el 12% de agricultores tiene menos de 30 años de edad; el 40% tienen entre 30 y 49 años de edad y el 48% tiene más de 50 años.

En ese sentido, el Programa de Formación Agraria y de Apoyo al Emprendimiento Juvenil en el Perú (FORMAGRO) fue diseñado con la finalidad de mejorar el acceso y la calidad de la educación en el entorno rural alejado, mejorar y diversificar la producción agrícola, además de facilitar el acceso al mercado de millares de jóvenes productores y productoras agrícolas.

 

Objetivos

Su principal objetivo es mejorar las condiciones y perspectivas económicas de los jóvenes productores y productoras de las zonas rurales y periurbanas de las regiones de Áncash y Lima, así como de sus familias. Para ello, prioriza la formación y el asesoramiento técnico en la creación y consolidación de iniciativas empresariales individuales y grupales relacionadas con las cadenas de valor agrícolas.

Este amplio programa de formación permitirá que los jóvenes, que generalmente no terminan la secundaria, se formen y especialicen a fin de desarrollar sus competencias y mejorar su empleabilidad.

FORMAGRO sigue la política nacional peruana de cooperación internacional, con respecto al apoyo al proceso de descentralización, acceso universal a una educación de calidad, promoción de la competitividad agrícola y creación de oportunidades de trabajo para todos.

 

Participantes

Estudiantes de FORMAGRO – región Áncash (2016) Foto: Carlos Ly

FORMAGRO beneficiará directamente a 2,000 jóvenes productores y productoras que obtendrán un mejor acceso a una formación de calidad, que aumentarán y diversificarán su producción agrícola y mejorarán la transformación y comercialización de sus productos agroalimentarios.

Sin embargo, el proyecto no solo generará repercusiones importantes para estos jóvenes de entre 16 y 35 años, sino también para 10,000 personas de las regiones de Áncash y Lima, que también tendrán acceso a esta formación de calidad para mejorar así su condición de vida gracias al aumento de los ingresos de su familia.

Asimismo, se promoverán 24 iniciativas de negocios y 12 cadenas de valor, lo que permitirá dinamizar la economía y beneficiar a más de 20,000 personas en estas dos regiones.

Cabe señalar además que un total de cuatro centros de educación técnico-productiva – CETPRO (Huari, Vitis, Santa Eulalia, Pachacamac) y seis institutos superiores tecnológicos (Yanama, Caraz, Pacarán, Yauyos, Matucana y Lurín), ofrecerán un programa de formación en desarrollo agrícola y empresarial impartido por 24 profesores y 24 facilitadores competentes.